miércoles, 15 de febrero de 2017

Tipos de Sistemas hidropónicos

La hidropónia es un sistema que busca el cultivo sin necesidad de suelo agrícola

Existen diferentes tipos de sistemas hidropónicos para el cultivo de marihuana, sin embargo todos ellos tienen un único objetivo; alimentar a tus plantas con nutrientes específicamente preparados para ello.


Tipos de sistemas hidropónicos

No hay un sistema mejor que otro, por lo tanto, la elección debería basarse más en preferencias personales, económicas o técnicas.
Nosotros te indicaremos aquí los 6 sistemas básicos sobre los que se basan todas las variantes que hay en el mercado, para que puedas elegir adecuadamente:

1.       Sistema de goteo.
Es el más común de los sistemas hidropónicos para el cultivo de marihuana.
Funciona de un modo sencillo, con los nutrientes necesarios para el crecimiento de las plantas disueltos en un tanque de agua, separados de estas últimas.
Después, el agua se suelta mediante una red de tuberías y riegan a cada planta de forma individual. Dicho regado puede controlarse, tanto en frecuencia como en cantidad de agua utilizada, para adaptarlo a la necesidad de cada planta.
Dentro de este sistema existen dos sub-sistemas, que básicamente se distinguen en el reciclaje del agua utilizada.

2.       Sistema de reflujo y drenado
Funciona de manera similar al anterior, pero con un enfoque más simplista; el agua se guarda en un tanque separado, mientras que las plantas se dejan en otra maceta justo encima del tanque.
Una bomba periódicamente introducirá los nutrientes en el agua y los dispersará en la parte superior, volviendo al tanque de agua todo el exceso de agua y nutrientes.
La ventaja de este sistema es que es relativamente barato y no requiere de apenas mantenimiento. Su gran desventaja es que todas las plantas son regadas por igual, no adaptándose individualmente como el sistema de goteo.
Uno muy famoso es el “Vinagrow”.

3.       Técnica de cinta de nutrientes (NFT)
Es un sistema hidropónico utilizado principalmente para plantaciones pequeñas.
La gran ventaja de este sistema es que no requiere de un temporizador, ya que la solución de nutrientes se va bombeando en la bandeja de las plantas de forma continua. Dicha bandeja, también llamada “bandeja de crecimiento” y "bandeja de cultivo" se construye con una ligera inclinación hacia abajo, para aprovechar la gravedad, de forma que la solución entra por la bandeja, fluye por todas las plantas y se drena hacia el cubo con el agua todo lo sobrante.
La cinta se mantiene siempre al mínimo, evitando así el riesgo de inundación o que las plantas de marihuana se rieguen demasiado.
El mantenimiento es también sencillo, requiriendo tan sólo añadir más solución de nutrientes y encender la bomba.
Debido a que no hace falta vigilarlo tanto, estos sistemas suelen traer una piedra difusora en el tanque de nutrientes, para que el agua siga oxigenada y no se oxide.

4.       Sistema aeropónico
Es el más novedoso de los sistemas de crecimiento para marihuana mencionados.
Las plantas están colgadas en el aire, con sus raíces al descubierto. Abajo se sitúa un sistema de riego por aspersor, el cual mediante la presión de una bomba sube los nutrientes y al llegar a los aspersores se dispara una “niebla” que riega las raíces de las plantas.
Debido a que la cantidad de riego es pequeña, requiere de muchos más regados, y por ello, el temporizador es mucho más complejo de ajustar.
Debido a que la solución de nutrientes se oxigena más que en los otros sistemas, el tiempo de crecimiento es mucho menor, aunque esto se refleja en el coste ya que se debe reponer el agua y los nutrientes con mucha frecuencia.

5.       Cultivo de aguas profundas (DWC)
Es el más básico de los sistemas, y se distingue claramente porque en este caso las plantas no se mantienen separadas del tanque de agua con nutrientes. Se basa simplemente en situar las plantas en una plataforma que mantendrá a las hojas alejadas del agua, pero permitirá a las raíces crecer hacia abajo.
Debido a que no circula el agua, es imprescindible incluir una piedra difusora en el fondo para que compense dicho aspecto. Al permanecer las raíces mucho tiempo debajo del agua, no es especialmente indicado si las plantas no necesitan de abundante cantidad de H2O.

6.       Sistema acuapónico
Con este sistema se crear un mini ecosistema, del que se pueden beneficiar tanto tus plantas como los peces.
Dichos peces viven en el tanque de agua, en el que depositaremos comida para peces. Al comer, expulsarán excrementos que contienen amonio, dicho compuesto, al entrar en contacto con el agua, se convierte en nitrato y con una bomba extractora se suben a la bandeja superior en donde se encuentran las plantas.
Cuando las plantas absorben el amonio liberan el agua sobrante que se deposita de nuevo en la “pecera”, y el proceso sigue su curso.


Recuerda que cualquiera de estos sistemas puede ayudarte a cultivar, pero debes observar  las características de tu habitáculo y planta antes de elegir el más adecuado.

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